La osteopatía es una disciplina que se centra en el diagnóstico, la valoración y tratamiento global del cuerpo. Su objetivo es restablecer el equilibrio corporal mediante técnicas de terapia manual. Tiene la misión de recuperar la movilidad de diversas estructuras, como huesos, ligamentos, músculos y tejido conjuntivo, aliviando tensiones y facilitando una adecuada circulación sanguínea para nutrir los tejidos y promover el buen funcionamiento del sistema nervioso. De esta manera, se potencian los mecanismos naturales de autocuración y autorregulación del organismo.
La osteopatía se enfoca en identificar, tratar y prevenir lesiones y disfunciones, mediante el abordaje de las causas subyacentes que las originan. Estas causas aparentemente pueden parecer que no tienen relación con los síntomas que nos preocupan, y pueden ser tan diversos como desequilibrios biomecánicos, secuelas de accidentes o desajustes en el sistema nervioso y metabólico. Para que nuestro cuerpo funcione de manera óptima, es esencial que todas las estructuras se muevan adecuadamente, las técnicas osteopáticas mejorarán la movilidad de los tejidos, el flujo sanguíneo y liberan la compresión sobre el sistema nervioso. Cuando la estructura funciona correctamente, podemos recuperar la homeostasis y optimizar nuestras funciones. Todo en nuestro cuerpo se mueve y tiene un ritmo, la osteopatía nos libera y nos ayuda a recuperar la armonía.
La osteopatía puede ser utilizada por cualquier persona, sin importar su edad. Se pueden tratar desde bebés y niños hasta personas de edad avanzada.