10 May El cuerpo humano es mucho más que la máquina, las emociones y los pensamientos mandan por encima de todo
“Hemos normalizado no encontrarnos bien y tener dolor”. Aunque pueda parecer una afirmación muy dura es completamente cierta. Nos duele la cabeza porque pasamos muchas horas delante del ordenador, nos duelen los brazos porque debido a nuestro trabajo no paramos de levantar pesos, cuando comemos nos duele la barriga porque estamos estresados… y no pasa nada porque són gajes del oficio y porque es lo que hay. “Estamos desnaturalizados, no estamos hechos para funcionar con el sistema de vida que tenemos hoy en día” y no somos conscientes de ello hasta que recuperamos nuestro punto de equilibrio y el bienestar.
Este punto de equilibrio es único en cada persona y para llegar a conseguirlo cada uno debe seguir su propio camino. Marta Banqué acompaña a las personas que visitan su centro Na’am a recuperar ese bienestar. En este camino hacia el bienestar hay quien necesita un fisioterapeuta, un preparador físico, un nutricionista, o profesionales que trabajan con aquella parte de nosotros más intangible como son las emociones y los pensamientos. Todos estos perfiles profesionales que pueden ayudar a sanar cada una de las facetas del ser humano están presentes en el centro de Marta Banqué.
“En mi centro tengo todo aquello que yo he estudiado y en lo que yo creo porque al final somos un todo”. La medicina tradicional china hace más de 3000 años ya hablaba de que éramos un todo, de que nuestros sistemas se conectan mediante meridianos. En cambio, a lo largo de los últimos siglos nuestra sociedad se esforzó en ir seccionando todo aquello que formaba parte de nosotros. “La mentalidad de seccionar, analizar y separar” nos ha hecho un flaco favor a la hora de entender el ser humano como un conjunto.
Marta Banqué ha dedicado muchos años de su vida a estudiar estas conexiones que existen entre todo lo que nos pasa, lo que sentimos y cómo nuestro entorno nos afecta. Fisioterapia, osteopatía, medicina china, biodescodificación, posturología, neuropsicoinmunología… todos estos conocimientos sumados a muchos años de experiencia cuidando, ayudando y acompañando personas en este recorrido hacia el bienestar a disposición de todos aquellos que visitan Na’am. “En Na’am ayudamos a que la gente tome conciencia de que todo lo que hacen tiene un impacto en su salud”.
A raíz de la COVID-19, muchas personas tomaron conciencia de la importancia de cuidarse y llevar una vida más sana. Alimentarse mejor, hacer actividad física, reducir los ejes de estrés… pero no es suficiente. Todavía existen ciertas reticencias a cuidar aquello que no se ve, pero que resulta imprescindible tenerlo en equilibrio para sentirse bien y conseguir ese bienestar. Si no cuidamos lo intangible, aquello tangible y físico también se resiente de ello. “La postura afecta nuestro estado de ánimo, los músculos de la cara están conectados con las emociones y nuestro cuerpo manifiesta conflictos emocionales o traumas vividos en forma de enfermedades, signos o síntomas”. Volvemos a los preceptos de la medicina china: todo en nosotros está absolutamente conectado: todos nuestros sistemas y la parte que se ve y la que no se ve.
“En Na’am acompañamos a las personas hacia el bienestar y podemos trabajar las distintas capas”. La parte física, la parte química o orgánica, la parte energética, la vibracional, la psicológica y la emocional: si alguna de estas capas no está en equilibrio o sufre alguna alteración, el resto de ellas se resiente. Las personas que acuden a Na’am pueden cuidar de todos sus estratos en un mismo centro. “Así resulta más fácil, podemos hacer un seguimiento y no se pierde información por el camino. Cada cosa que hacemos, cada paso que damos es para enlazar de donde venimos y hacia dónde vamos”.
El proyecto de Marta Banqué es ambicioso y no escatima esfuerzos en seguir aprendiendo y cuidar y acompañar a aquellas personas que confían en ella y en Na’am para recuperar su bienestar. “Cada vez las personas vienen más concienciadas y con predisposición a que les ayudemos”. Sin ningún tipo de duda Na’am tiene mucho recorrido por delante, es un proyecto vivo que no se detiene y que va incorporando a su equipo disciplinas y profesionales que pueden ayudar a las personas en este entorno tan cambiante en el que vivimos. “Ojalá algún día haya hospitales en los que puedas entrar como ser humano y no solo tengan en cuenta tu dimensión física, sinó también la emocional y la energética”
“Cuando ayudas a alguien y te dice Oye, quiero que veas a mi hijo o a mi marido, esto es una satisfacción brutal”. ¿Y qué mejor carta de recomendación puede existir que querer para aquellos que más queremos, que alcancen ese bienestar que tanto bien nos hace?